En él se registraría a cada animal del municipio mediante una muestra de ADN, dotando a cada ejemplar de su huella genética, la cual es fundamental para identificar muestras biológicas.

La creación de este censo abre la puerta a la erradicación del maltrato animal, los abandonos y los excrementos en las calles de nuestro municipio. Y es que precisamente una de las quejas que más llega al Ayuntamiento es la referida a este último punto, el de la suciedad provocada por la conducta incívica de algunos individuos que no recogen las deposiciones de sus perros.

El Sistema Experto Genotipado y Contraste de Identidad (SEGECO), creado por un laboratorio de origen español, y que ya se está implantando en ayuntamientos como Sevilla, Málaga o Cádiz, permite sancionar a los dueños de los perros que no recogen los excrementos de los animales mediante el análisis del ADN de los restos. Un análisis cuyo coste recaerá en el infractor.

Además, dicho censo genético también permite otros servicios para la sociedad, tales como resolver casos de perros abandonados, sin microchip, o maltratados, y que gracias a este registro podrían ser identificados o devueltos a sus dueños.

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